Dedicado a mis "compis" D2D de Cruz Roja
y, por extensión, al resto de todos aquellos
que hemos trabajado en 'fundraising'.
A la hora de la siesta,
cuando los vencejos hablan
y las calles paren fuego.
A la hora de la siesta,
dos y media de la siesta,
se estremecen las caricias
y una lágrima de niño
cae desnuda sobre un vaso
mitad de leche y mitad de agua.
Gira el mundo como siempre
y asaetan los relojes
la noción de la importancia.
Todo eso ocurre
a la hora de la siesta,
tres en punto de la siesta.
Cuando agitan los grilletes
unas manos inhumanas
que huelen a violencia, alcohol y muerte.
A la hora de la siesta,
tres y media de la siesta,
los ancianos hablan solos
y un cadáver descuidado
arriba a las playas de la desmemoria.
Los presos del infierno,
de todos los infiernos conocidos,
agitan desesperadamente
una mano que es piel y hueso
a la hora de la siesta,
cuatro en punto de la siesta.
Tiembla la tierra,
arden los montes,
truenan las balas,
suenan los timbres...
a la hora de la siesta.
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