29 ene 2011

No sería yo

sin este viento de pieles calladas,
sin estos besos con gusto a cianuro,
sin estas manchas de sangre en el muro,
sin esta agenda de puertas cerradas,

sin este mapa de las puñaladas,
sin estos versos de un viejo conjuro,
sin estas ganas de ser más oscuro,
sin estas luces de neón apagadas,

sin este hueco en un cine vacío,
sin estas noches de olvido y absenta,
sin este gris corazón dando voces,

Sin estas páginas muertas de frío,
sin este absurdo cartel de "Alma en venta",
yo no sería el bufón que conoces.

1 comentario:

Stewart dijo...

Quizás el viento en las calladas pieles,
o el beso con olor a almendra amarga,
las pruebas del delito, sin adarga,
o la cerrada puerta en tus papeles.

O el mapa del camino de la daga,
quizá unas lineas magicas y sacras,
las ganas de observar la oscura lacra
del tiempo y el neón que se te apaga.

O el espacio en el patio de butacas,
o el futuro cargado de resacas,
o un corazón de sacándose alfileres

Tal vez unas palabras ateridas,
o un alma, por supuesto, mal vendida,
te hacen ser el ser que has sido y eres.