30 sept 2010

La voz de la conciencia

No es tan malo seguir el buen camino
ni tan bueno invertir en necedades,
las balas duelen más que las verdades
que escupe a tus espaldas el destino.

Escucha los consejos del vecino
que sabe subsistir sin libertades,
las sangres que lubrican soledades
terminan por llamarle pan al vino.

Encuéntrale el sentido a las mentiras,
no bebas de las aguas de las fuentes
que escriben cuando la tinta no escribe.

Arráncate la piel del pecho a tiras,
encierra al corazón y nunca intentes
vivir tal como vive el que suscribe.

1 comentario:

Stewart dijo...

Hola caronte, genial el soneto, y gracias por tu comentario en el cuchitril, te sigo leyendo.

Saludos!!!